La verdad es que me ha sorprendido gratamente. Es una cafetera sólida, "con peso", que se adapta bien a la cocina dado su estilo. El panel de control indica todo lo que se necesita ver de modo muy intuitivo: hora, intensidad de café elegido, número de tazas… Puedes utilizar café molido o en grano; en este caso puedes moler el café en diferentes grados de molienda, adaptado a tu gusto. La intensidad del café, más suave o más fuerte, también se puede elegir. Es muy práctico porque por ejemplo a mí el café solo me gusta suave, pero si lo tomo con leche lo hago un poco más cargado. A mi marido, que le gusta solo, le gusta el café intenso. También me gusta la jarra, tamaño familiar para hacer un buen perolo y tomarlo entre varias personas (10 tazas). De hecho también puedes programarlo para tomarlo recién hecho cuando tú quieras. Esta parte es muy práctica porque nosotros siempre hacemos una parada a las 10:30 , así que siempre está listo, caliente y humeante. Para ello tienes que ajustar el reloj que trae incorporado. También lo mantiene caliente durante un tiempo de 30 minutos, aproximadamente. La marca es de muy buena calidad, Krups siempre ha sido sinónimo de buen hacer y de estilo en sus aparatos. Estoy muy contenta y hasta ahora no hemos tenido ningún problema. La garantía es de 2 años, como siempre, y el libro de instrucciones es fácil de entender, viene en 15 idiomas incluido el español.
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