Compré la tostadora hace 2 años. Era muy bonita y funcionaba muy bien.
Pero a los 12 meses justos se estropeó. Llamé a Amazon y me enviaron otra igual de reemplazo.
12 meses después, es decir 24 meses de la primera compra, la segunda tostadora nueva dejó de funcionar de nuevo. Esta vez ni en Amazon ni en Taurus me han dado ninguna respuesta. Amazon me dijo que no podían hacer nada y me dieron el teléfono de Taurus. Llamé por teléfono a Taurus y muy amablemente me dijeron que la garantía son 24 meses punto es lo que dice la ley punto pero lo que dice el sentido común es que si la segunda tostadora ha durado también 12 meses está claro que hay un defecto de fabricación de este modelo. Me dijeron que no tenía ninguna solución. Que la tira a la basura. Es cierto que la ley dice que son 24 meses de garantía desde la primera compra. Pero una cosa es lo que dice la ley y otra lo que dice el sentido común. Una empresa del prestigio de Taurus debería de dar solución a estas excepciones. Reconocer que hay un fallo de fabricación en este modelo y reemplazarlo aunque sea 12 meses después de la entrega del segundo ejemplar. Es totalmente absurdo que una tostadora de reemplazo, nueva se supone, vuelva a estropearse a los 12 meses de uso. Ha durado 12 meses. Y de estos 12 meses de uso efectivo han sido dos. Ya que debido a la pandemia no hemos podido venir a la playa donde estaba esta tostadora.
En resumen que esta tostadora está diseñada para que dure 12 meses, solo 12 meses ni más ni menos.
Así que ya sabéis. Nunca compréis está tostadora y nunca compréis marca Taurus.
Es una pena pero así funciona la obsolescencia programada.
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